El papel lo aguanta todo, pero nuestro proyecto no

  • By Daniela Melo
  • 9 noviembre, 2019
  • 255 Views

Escrito por: Luisa Fernanda Suárez Araujo
Ingeniera Técnico Comercial
Luisa, tiene más de 15 años de experiencia en el uso de geosintéticos
aplicados en proyectos de infraestructura.

En ciertas oportunidades hemos escuchado la frase: “Tenga cuidado, porque el papel lo aguanta todo”, y ya se nos volvió una advertencia tan trillada que dejamos de ver lo que realmente está detrás de esa expresión. En este mundo globalizado, donde es tan sencillo hacer pedidos en línea al otro lado del mundo, hemos ganado cada vez más confianza en los productos importados; hoy en día vamos al supermercado y preferimos la pera importada a la nacional, preferimos comprar los cereales gringos a las granolas locales, preferimos pedir la ropa por internet que comprarla en el centro comercial. Y esto no está mal, porque finalmente sabemos y entendemos que tenemos un mundo sin límites y que la globalización es una muy buena forma de encontrarnos con nuevas culturas, con nuevos productos y con nuevas experiencias.

El problema radica cuando ganamos tal confianza sobre los productos importados que algunas veces no vemos lo que realmente hay detrás y damos por ciertas las características que nos muestran en una ficha técnica o en un certificado, y es aquí donde sale a florecer la famosa frase de cajón “El papel lo aguanta todo”. Nosotros como ingenieros civiles, diseñadores, interventores o constructores, reconocemos cómo nuestro trabajo, experiencia y conocimiento afecta positiva o negativamente un proyecto, por eso estamos en constante preparación, actualizando nuestros conocimientos, especializándonos, investigando nuevas tecnologías y nuevas formas de construcción, pero todo este esfuerzo se ve opacado si a la hora de materializar el proyecto rompemos la cadena de valor que nos hemos esforzado en mantener desde el diseño y decidimos instalar un producto de una “aparente” buena calidad.

La diferencia es enorme entre cuando compramos un producto para nuestro uso personal y este nos sale defectuoso o cuando compramos un producto para nuestra obra y este no cumple con los requerimientos del proyecto. La diferencia es que nosotros estamos comprando soluciones que son instaladas en edificios, fábricas, puentes, vías, rellenos sanitarios, taludes, presas, ríos, canales, túneles, etc. y en el mejor de los casos, un producto que no cumpla las especificaciones del proyecto, traerá pérdidas financieras, pero en el peor de los casos la perdidas pueden ser ambientales o humanas.

Hoy entran al país más de 6000 toneladas de Geosintéticos importados al año, muchos de estos productos son de muy buena calidad y así mismo van a ayudarnos a garantizar la calidad de nuestra obra. Pero desafortunadamente también nos hemos encontrado con productos que prometen unas características en sus fichas técnicas pero que no se cumplen a la hora de ensayarlos en el laboratorio, productos fabricados con materiales reciclados, productos que han sido fabricados con estándares muy bajos de control y calidad.

“Un producto que no cumpla las especificaciones del proyecto, traerá pérdidas financieras, pero en el peor de los casos la perdidas pueden ser ambientales o humanas”

Constantemente a nuestro laboratorio llegan muestras que nos traen nuestros clientes para verificar las propiedades que están en las fichas técnicas de los productos, y en algunos casos hemos tenido que evidenciar la falsedad en lo que prometen los fabricantes o comercializadores de esos productos. Nuestra misión es hacerle ver eso a la ingeniería de nuestro país, es darles a ustedes herramientas para que puedan hacer una mejor selección de sus soluciones y de sus proveedores, es acompañarlos para lograr un proyecto exitoso y seguro. Por eso queremos compartirles algunos puntos importantes a tener en cuenta:

  1. Busque proveedores con experiencia en el mercado local. En la medida de lo posible compre productos en empresas que le brinden la tranquilidad de años de experiencia en el país. Todos los años en Colombia se crean miles de sociedades, pero así mismo cientos desaparecen; de seguro una empresa con 10 años de experiencia tendrá mucho menos que perder que una empresa con 50 años en el mercado local.
  2. Exija un laboratorio acreditado por GAI-LAP. La única forma de verificar si los valores de las propiedades que están en las fichas técnicas son reales, es sometiendo las muestras a ensayos de laboratorio. Por eso es importante que su proveedor cuente con un laboratorio acreditado por GAI-LAP que le permita tener la tranquilidad de procesos controlados y valores garantizados.
  3. Valore el respaldo técnico detrás de cada empresa. Escoger un buen producto que cumpla todas las especificaciones técnicas es importante, pero no podemos dejar atrás al recurso humano. Contar con un proveedor que tenga ingenieros civiles expertos y especialistas en áreas de geotecnia, pavimentos, hidráulica, gestión de proyectos, etc. garantiza que su obra podrá tener la asesoría que requiera para su éxito.
  4. El precio más bajo no siempre es la mejor opción. ¡Colegas ingenieros despertemos!, como dicen por ahí: “de eso tan bueno no dan tanto”. Un precio más bajo no siempre es sinónimo de mala calidad, pero cuando encontramos precios que están muy por debajo de lo que está el mercado es mejor que indaguemos a costa de qué se está logrando ese precio. Lo importante es que no sea a costa de la calidad de nuestro proyecto.
  5. A la hora de comprar, exijan que los certificados de calidad los emita el fabricante, porque es como si uno compra un bulto de cemento en la ferretería pollito de la esquina, y el certificado de calidad lo emite “ferretería pollito” y no quién realmente produjo el material

En definitiva, el papel si lo aguanta todo pero nuestras obras civiles, que normalmente implican vidas humanas, no. Sigamos construyendo país de forma responsable y llenándonos de orgullo por cada proyecto que terminamos con éxito.

 

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Escrito por: Luisa Fernanda Suárez Araujo
Ingeniera Técnico Comercial
Luisa, tiene más de 15 años de experiencia en el uso de geosintéticos
aplicados en proyectos de infraestructura.

En ciertas oportunidades hemos escuchado la frase: “Tenga cuidado, porque el papel lo aguanta todo”, y ya se nos volvió una advertencia tan trillada que dejamos de ver lo que realmente está detrás de esa expresión. En este mundo globalizado, donde es tan sencillo hacer pedidos en línea al otro lado del mundo, hemos ganado cada vez más confianza en los productos importados; hoy en día vamos al supermercado y preferimos la pera importada a la nacional, preferimos comprar los cereales gringos a las granolas locales, preferimos pedir la ropa por internet que comprarla en el centro comercial. Y esto no está mal, porque finalmente sabemos y entendemos que tenemos un mundo sin límites y que la globalización es una muy buena forma de encontrarnos con nuevas culturas, con nuevos productos y con nuevas experiencias.

El problema radica cuando ganamos tal confianza sobre los productos importados que algunas veces no vemos lo que realmente hay detrás y damos por ciertas las características que nos muestran en una ficha técnica o en un certificado, y es aquí donde sale a florecer la famosa frase de cajón “El papel lo aguanta todo”. Nosotros como ingenieros civiles, diseñadores, interventores o constructores, reconocemos cómo nuestro trabajo, experiencia y conocimiento afecta positiva o negativamente un proyecto, por eso estamos en constante preparación, actualizando nuestros conocimientos, especializándonos, investigando nuevas tecnologías y nuevas formas de construcción, pero todo este esfuerzo se ve opacado si a la hora de materializar el proyecto rompemos la cadena de valor que nos hemos esforzado en mantener desde el diseño y decidimos instalar un producto de una “aparente” buena calidad.

La diferencia es enorme entre cuando compramos un producto para nuestro uso personal y este nos sale defectuoso o cuando compramos un producto para nuestra obra y este no cumple con los requerimientos del proyecto. La diferencia es que nosotros estamos comprando soluciones que son instaladas en edificios, fábricas, puentes, vías, rellenos sanitarios, taludes, presas, ríos, canales, túneles, etc. y en el mejor de los casos, un producto que no cumpla las especificaciones del proyecto, traerá pérdidas financieras, pero en el peor de los casos la perdidas pueden ser ambientales o humanas.

Hoy entran al país más de 6000 toneladas de Geosintéticos importados al año, muchos de estos productos son de muy buena calidad y así mismo van a ayudarnos a garantizar la calidad de nuestra obra. Pero desafortunadamente también nos hemos encontrado con productos que prometen unas características en sus fichas técnicas pero que no se cumplen a la hora de ensayarlos en el laboratorio, productos fabricados con materiales reciclados, productos que han sido fabricados con estándares muy bajos de control y calidad.

“Un producto que no cumpla las especificaciones del proyecto, traerá pérdidas financieras, pero en el peor de los casos la perdidas pueden ser ambientales o humanas”

Constantemente a nuestro laboratorio llegan muestras que nos traen nuestros clientes para verificar las propiedades que están en las fichas técnicas de los productos, y en algunos casos hemos tenido que evidenciar la falsedad en lo que prometen los fabricantes o comercializadores de esos productos. Nuestra misión es hacerle ver eso a la ingeniería de nuestro país, es darles a ustedes herramientas para que puedan hacer una mejor selección de sus soluciones y de sus proveedores, es acompañarlos para lograr un proyecto exitoso y seguro. Por eso queremos compartirles algunos puntos importantes a tener en cuenta:

Busque proveedores con experiencia en el mercado local. En la medida de lo posible compre productos en empresas que le brinden la tranquilidad de años de experiencia en el país. Todos los años en Colombia se crean miles de sociedades, pero así mismo cientos desaparecen; de seguro una empresa con 10 años de experiencia tendrá mucho menos que perder que una empresa con 50 años en el mercado local.
Exija un laboratorio acreditado por GAI-LAP. La única forma de verificar si los valores de las propiedades que están en las fichas técnicas son reales, es sometiendo las muestras a ensayos de laboratorio. Por eso es importante que su proveedor cuente con un laboratorio acreditado por GAI-LAP que le permita tener la tranquilidad de procesos controlados y valores garantizados.
Valore el respaldo técnico detrás de cada empresa. Escoger un buen producto que cumpla todas las especificaciones técnicas es importante, pero no podemos dejar atrás al recurso humano. Contar con un proveedor que tenga ingenieros civiles expertos y especialistas en áreas de geotecnia, pavimentos, hidráulica, gestión de proyectos, etc. garantiza que su obra podrá tener la asesoría que requiera para su éxito.
El precio más bajo no siempre es la mejor opción. ¡Colegas ingenieros despertemos!, como dicen por ahí: “de eso tan bueno no dan tanto”. Un precio más bajo no siempre es sinónimo de mala calidad, pero cuando encontramos precios que están muy por debajo de lo que está el mercado es mejor que indaguemos a costa de qué se está logrando ese precio. Lo importante es que no sea a costa de la calidad de nuestro proyecto.
A la hora de comprar, exijan que los certificados de calidad los emita el fabricante, porque es como si uno compra un bulto de cemento en la ferretería pollito de la esquina, y el certificado de calidad lo emite “ferretería pollito” y no quién realmente produjo el material
En definitiva, el papel si lo aguanta todo pero nuestras obras civiles, que normalmente implican vidas humanas, no. Sigamos construyendo país de forma responsable y llenándonos de orgullo por cada proyecto que terminamos con éxito.

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